Un órgano para examinar, monitorear e informar sobre el derecho a la vivienda en el mundo
La Relatoría Especial para el Derecho a una Vivienda Adecuada de las NNUU fue creada en el año 2000. Su función es examinar, monitorear, aconsejar e informar sobre la situación del derecho a la vivienda en el mundo, así como promover asistencia y cooperación a los Gobiernos para garantizar mejores condiciones de la vivienda, y estimular el diálogo con los demás organismos de las NNUU y otras organizaciones internacionales con el mismo fin.
Las relatorías las ejercen personas expertas nombradas por el Consejo de Derechos Humanos. Realizan su trabajo de forma independiente, no forman parte de la estructura asalariada de las NNUU y tienen un mandato de tres años, con la posibilidad de una única reelección. El trabajo del relator no es remunerado, pero recibe apoyo en materia de recursos humanos, logísticos y asistencia para investigaciones por parte del Alto Comisionado para los Derechos Humanos, con sede en Ginebra.
Los relatores forman parte de los llamados “Procedimientos Especiales” del Consejo de Derechos Humanos, que reúne mecanismos adoptados por el Consejo para monitorear determinados temas o países. Actualmente hay 30 relatorías temáticas y ocho para países específicos.
Los expertos nombrados no representan a los países de los que tienen la nacionalidad y su independencia es esencial para que desarrollen sus funciones de forma libre.
Las principales actividades de la Relatoría Especial para el Derecho a una Vivienda Adecuada son:
• Recibir informaciones sobre casos específicos de violaciones del derecho a la vivienda
• Pedir aclaraciones a los gobiernos, por medio de apelaciones urgentes y cartas de alegaciones
• Hacer misiones oficiales en los países para investigar la situación del derecho a la vivienda
• Presentar un informe anual al Consejo de Derechos Humanos de las NNUU, en Ginebra, y otro a la Asamblea General de las NNUU, en Nueva York, que aborden temas específicos o relaten las misiones realizadas.